Se calcula que en país habría unas 3,000 hectáreas, ubicadas principalmente en el Valle del Cauca. Gracias a una mejora de los manejos agronómicos se está obteniendo fruta de calidad, que ha permitido realizar las pruebas comerciales de exportación.
Colombia será un referente importante en la agroexportación. Ya lo está demostrando en cultivos como el aguacate y, están asomando otros nuevos como el arándano, donde hay proyectos que pronostican unas 500 nuevas hectáreas. Otro cultivo que está experimentando un crecimiento en el último tiempo es la uva de mesa, donde se calcula que hoy en día hay unas 3,000 hectáreas (ha) en le país.
“Hace siete años participé de un proyecto con productores locales, y en este entonces había sobre 1,500 ha”, recuerda Jorge Inofuentes, asesor, especialista en nutrición; sobre un cultivo que ha sostenido su expansión en Red Globe, variedad cuyas producciones se han destinado principalmente al mercado interno, compitiendo ‘codo con codo’ con la uva importada desde Perú y Chile. Sin embargo, hoy, teniendo una mayor superficie cultivada, ya están haciendo las primeras pruebas de exportación.
“Como la decisión de plantar variedades nuevas no ha sido tan rápida como en Perú, por ejemplo, los productores locales están en las listas de espera de algunos programas de mejoramiento como IFG, por ejemplo”, explica Inofuentes. Si bien han hecho algunos ensayos con nuevas variedades, la intensión es plantar más y competir en la exportación, donde Colombia cuenta con una ventaja competitiva importante: la cercanía a los mercados de destino.
Una de las variedades que se ha establecido con éxito en el país es Crimson, con la que se han obtenido buenos rendimientos productivos. “El ‘talón de Aquiles’ de los productores uveros de Colombia ha sido la acidez de la fruta. Sin embargo, con el correr de los años, han ido mejorando este tema, realizando mejores manejos del suelo, incorporando de mejor manera el fósforo”, explica el experto.
COBERTURAS PLÁSTICAS PARA PROTEGERSE DE LA LLUVIA
Una de las limitantes para la producción de uva de mesa en Colombia son las precipitaciones. Por ello es que ya se empieza a ver el uso de coberturas plásticas que, según los expertos, sostienen que sería de ayuda para las variedades más sensibles y complejas de manejar. “No creo que sea necesario en Red Globe, ya que en ella basta un buen manejo sanitario”, sostiene. Y es que esos manejos hoy están siendo cada vez más prolijos, “y gracias a ellos están sacando fruta de calidad”, afirma Inofuentes. Si bien los sistemas de conducción son los tradicionales, en el último tiempo se ha ido expandiendo el uso de ‘open gable’, mirando de cerca a lo que ha hecho la industria peruana en este sentido, pero también en otros aspectos, que han permitido al Perú transformarse en un importante jugador mundial.
“Los productores están abiertos a seguir creciendo, sobre todo porque han visto una interesante oportunidad de negocio”.
“Los productores están abiertos a seguir creciendo, sobre todo porque han visto una interesante oportunidad de negocio”, afirma Inofuentes. Una de las empresas locales que ha apostado por el cultivo es Top Fruits, pionera en el cultivo de uva de mesa sin semillas. De capitales locales, que hoy maneja unas 150 ha, con variedades como Crimson o Sugraone. Los productores pequeños también tienen inquietud en la uva de mesa y han aumentado la superficie plantada. Se trata de productores que hace unos años tenían 3 o 5 hectáreas, hoy están manejando 20 hectáreas. “Ubicados principalmente en el Valle del Cauca, los pequeños productores tienen la intensión de crecer, sabiendo que las condiciones de suelo que hay en esta zona son las óptimas, ya que tienen un porcentaje de materia orgánica entre un 8 y 9%, versus las condiciones, por ejemplo, de Perú, que están entre 0.3 y 0.4% de materia orgánica”, explica el experto.
Con manejos más sólidos se han logrado sacar 45 t/ha en una variedad como Crimson, con racimos de buen tamaño y buenos calibres de baya. “Si produciendo con variedades licenciadas se logra hacer un buen manejo del cultivo bajo plástico, en Colombia tendrían todas las condiciones para lograr buenas producciones. Y lo mejor es que se pueden dar el lujo de producir en la época que quieran”finaliza Inofuentes.